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Emblemas de la Hermandad


El primer emblema de la Hermandad de la Pasión, fue una cruz latina, tal como figura cosida en la tela de la primitiva bandera, y en las chapas metálicas que llevaban sujetas al brazo los hermanos, en los desfiles procesionales.

La cruz de la bandera era de color granate oscuro y la de los brazaletes negra.

Esta cruz se ha representado en los sellos de la Hermandad, de dos formas: cruz alargada de calvario, esto es, con pedestal, y cruz lobulada.


En el año 1935, y con ocasión de confeccionarse una nueva bandera, se pidió informes al Heraldista Marqués de Ciadoncha, sobre el emblema que procedía bordar en aquella.

Consecuencia de tal informe fue la adopción del emblema de la Orden religioso-militar del Santo Sepulcro de Jerusalén, formado por una cruz potenzada, con cuatro cruces más pequeñas en los ángulos.

Esta insignia en color rojo sobre fondo blanco, puede verse en la bandera y en las caperuzas de la Junta de Gobierno. Los demás hermanos la llevan en negro, también sobre fondo blanco.

La cruz quíntuple del Sepulcro se ha adoptado también para el sello y timbrado de impresos.

La actual bandera lleva bordado en el anverso, un hermoso medallón con efigie de Cristo crucificado, y en el reverso la Cruz quíntuplo del Sepulcro así como los escudos de Navarra y de Pamplona.



Otro emblema que caracteriza también a la Hermandad es el de la Orden de los Pasionistas de San Pablo de la Cruz, que figura en la fachada de la residencia y en su interior, y que se adoptó al erigirse la Hermandad en cofradía de la Vera Cruz agregada a la que aquella Orden dirige en Roma.




Antiguas Cofradías

No parece que tuvieran especiales emblemas las Cofradías que precedieron a la Hermandad.
No obstante, examinando algunos oficios y circulares impresos, se observa que la Cofradía del Santo Sepulcro les timbraba con la cruz encuadrada, tipo de cruz que se reproduce no sabemos si de intento o casualmente en los Báculos de algunos guiones de Pasos.
Los impresos de la Cofradía del Cristo Alzado solían encabezarse con la Cruz de Calvario, sobre pedestal.

La Cruz de Jerusalén

Desde 1935 la cruz de Jerusalén es el emblema por excelencia de la Hermandad de la Pasión. En 2010 celebramos el 75 aniversario de esta identificación, que hoy resulta familiar para todos los Hermanos y es conocida por muchos pamploneses. Conviene explicar la elección y la historia de este emblema, que se remonta a la Edad Media.

La Cruz de Jerusalén, también conocida como cruz de Tierra Santa o cruz de las Cruzadas o de los cruzados, e icono de la Orden de Caballería del Santo Sepulcro de Jerusalén. Dicha cruz es en realidad una composición de un total de cinco cruces, una cruz griega central, es decir, una cruz con los cuatro lados iguales o cuadrada, que en este caso se encuentra potenciada y cantonada de otras cuatro cruces iguales de menor tamaño, una entre cada brazo de la mayor.

La cruz como emblema gráfico es universalmente utilizada, sobre todo por el influjo del mundo cristiano, que encuentra en esta representación el más importante de todos sus iconos, pues es símbolo del sacrificio de Cristo. Es en la Edad Media cuando su uso se hace más generalizado, siendo utilizada como insignia no sólo por las autoridades eclesiásticas, sino también por los gremios y órdenes de caballería, que la materializaban en sus escudos y emblemas y la ondeaban en sus estandartes.

La Cruz de Jerusalén surgió en este contexto medieval, y lo hizo como escudo del nuevo reino fundado en Tierra Santa, el cual fue establecido tras la Primera Cruzada en el año 1099, y se debe a la figura de Godofredo de Bouillón, duque de la Baja Lorena, uno de los principales jefes de dicha Cruzada, predicada por Urbano II en el Concilio de Clermont, y el primero de los regentes de la ciudad de Jerusalén, bajo el título de Sancti Sepulchri advocatus, Protector del Santo Sepulcro.

Simbología de la Cruz de Jerusalén

La tradición, fuerza e historia de la Cruz de Jerusalén, está muy arraigada en la memoria del cristianismo, por lo que no es nada infrecuente encontrárnosla como emblema o parte de la heráldica de algunas cofradías o hermandad de pasión, máxime cuando su simbolismo y significado, no sólo su historia, está cargado de sentir cristológico y pasional. Así, el total de cinco cruces que componen este escudo representan las cinco llagas de Cristo –las producidas por los clavos en las manos y los pies, y la sufrida en el costado a consecuencia de la lanzada– . También se quiere ver en la cruz grande central, la representación de Jesucristo, aunque hay quien asegura que ésta, al estar compuesta por cuatro Taus, representa la ley del Antiguo Testamento. Por su parte, las cuatro cruces pequeñas simbolizan los cuatro evangelios proclamados en las cuatro esquinas de la Tierra comenzando en Jerusalén.

Como ya se ha dicho esta cruz también fue tomada como escudo del Reino de Jerusalén, y como tal era portada por mucho de los cruzados que según su procedencia la lucían de un esmalte o metal diferente (color heráldico), así, los franceses la llevaban de plata (blanco), los italianos de azur (azul oscuro), los alemanes de sable (negro), los polacos de sinople (verde), y los españoles de gules (rojo).